Adopción de dos nuevos protocolos de diagnóstico para prevenir plagas dañinas para los cultivos

Roma, 21 de noviembre de 2023. El Comité de Normas, en nombre de la Comisión de Medidas Fitosanitarias (CMF), ha adoptado dos protocolos de diagnóstico que ayudarán a proteger importantes cultivos de dos plagas vegetales específicas: la mosca de la fruta del género Ceratitis y el ácaro verde de la yuca (Mononychellus tanajoa).

Los protocolos de diagnóstico son un conjunto de procedimientos y métodos para detectar e identificar plagas vegetales reglamentadas, y son fundamentales a la hora de aplicar adecuadamente las medidas fitosanitarias destinadas a facilitar un comercio internacional seguro.

Protocolo de diagnóstico 32: Género Ceratitis

El género Ceratitis pertenece a la familia Tephritidae, conocida comúnmente como mosca de la fruta, incluye especies que dañan los cultivos utilizados en la agricultura comercial y de subsistencia.

Una vez que la hembra pone huevos en la fruta y éstos eclosionan, la larva se alimenta de la fruta y la daña directamente. Los daños indirectos son causados por el aumento de la susceptibilidad de la planta a patógenos oportunistas de la fruta como resultado de las lesiones que se producen cuando la hembra pone los huevos en la fruta, así como por los daños derivados de la alimentación de las larvas.

Las especies de Ceratitis pueden alimentarse de cualquier fruta, pero se sabe que algunas se alimentan de una fruta en particular o de un linaje de especies de plantas. Sin embargo, no se conoce con precisión la relación entre muchas especies de Ceratitis y sus plantas hospedadoras. De hecho, algunas especies pueden infestar una gama más amplia de hospedantes de la que se tiene constancia en la actualidad.

El protocolo de diagnóstico 32 incluye seis especies de Ceratitis de importancia económica basándose en su distribución y estatus como plagas polífagas o que se alimentan de múltiples especies de plantas.

La especie más destructiva del género es la mosca mediterránea de la fruta (Ceratitis capitata), nativa del África subsahariana pero que se ha extendido rápidamente a otras regiones de África, como también a Hawai, América del Sur, América Central, Australia y países de la región mediterránea. Se han descrito cientos de especies de plantas como hospedadoras de la mosca mediterránea de la fruta.

Por su parte, la mosca del mango (Ceratalaspis cosyra) es una plaga de muchos frutales hospedadores, aparte del mango, como la guanábana, el níspero y la guayaba. Se encuentra en gran parte del África subsahariana y, según los informes, es un complejo de especies crípticas.

Las otras cuatro especies incluidas en el protocolo son Pterandrus fasciventris, Pterandrus anonae Graham, Pterandrus rosa Karsch y Pterandrus quilicii. Infestan una amplia gama de hospedadores cultivados comercialmente. La distribución de cada una de estas cuatro especies incluye varios países del África subsahariana. Aunque cada especie tiene un área de distribución diferente, estas áreas pueden solaparse.

Protocolo de diagnóstico 33: Mononychellus tanajoa

El ácaro verde de la yuca (Mononychellus tanajoa) es una de las principales plagas de esta planta, un cultivo básico para más del 11% de la población mundial. Es una especie tropical y subtropical y actualmente está ampliamente distribuida en África y América del Sur y Central.

El ácaro verde de la mandioca se alimenta perforando los tejidos de la planta y succionando el contenido de las células, lo que provoca la deformación de las hojas y el moteado clorótico, la defoliación de las partes superiores de los brotes y una pérdida del 50 al 80% del rendimiento de las raíces de almacenamiento.

Los protocolos de diagnóstico son el resultado de un proceso medio de cuatro años: los expertos internacionales en diagnóstico redactan los protocolos, que luego son revisados por el Grupo técnico sobre protocolos de diagnóstico (GTPD), un grupo de expertos internacionales nombrados por el Comité de Normas (CN). A continuación, se someten a consulta internacional, son revisados y adoptados por el CN. Este largo proceso garantiza la armonización de dichos protocolos para que todas las partes contratantes de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) puedan aplicarlos en el comercio internacional de cultivos. Las partes contratantes reciben notificación de los nuevos protocolos de diagnóstico adoptados, y la Secretaría de la CIPF abre el periodo de notificación dos veces al año.

"Se sabe que la detección precoz y el diagnóstico preciso pueden minimizar el riesgo y el impacto de un brote de plagas. Estos nuevos protocolos internacionales de diagnóstico aprobados se sumarán al conjunto de opciones de diagnóstico para todas las partes contratantes de la CIPF, mejorando sus capacidades en materia de información armonizada y métodos de diagnóstico de plagas", declaró Adriana G. Moreira, oficial de establecimiento de normas de la Secretaría de la CIPF.

Los protocolos de diagnóstico recientemente adoptados están disponibles en la página web de Normas adoptadas (NIMF) en https://www.ippc.int/es/core-activities/standards-setting/ispms/.

Para más información sobre el periodo de notificación de los protocolos de diagnóstico, consulte https://www.ippc.int/es/core-activities/standards-setting/notification-period-dps/