Guinea-Bissau protege sus cultivos y su comercio de las plagas: Técnicos en salud vegetal capacitados en el uso de herramientas modernas de prevención de plagas

Los participantes en el taller de formación posan con Fatumata Djau Baldé, ministra de Agricultura y Desarrollo Rural de Guinea-Bissau (segunda fila, tercera por la izquierda). A su izquierda, Osama El-Lissy, secretario de la CIPF, y a su lado, Mario Reis, representante adjunto de la FAO en Guinea-Bissau. Maria Rosa de Sa Evora Ferreira, directora de los Servicios de Protección Fitosanitaria (segunda fila, segunda por la izquierda).

6 de marzo de 2024, Bissau - Treinta y ocho profesionales de la sanidad vegetal a nivel nacional, incluidos funcionarios fitosanitarios y técnicos de campo en Guinea-Bissau, recibieron formación en enfoques científicos prácticos o aplicados sobre el terreno y herramientas digitales de última generación diseñadas para la detección, vigilancia, diagnóstico y prevención oportunos de plagas. Reducir el impacto de las plagas en los cultivos contribuye a fomentar la seguridad alimentaria y el comercio seguro.

La formación, celebrada del 4 al 6 de marzo de 2024 en la capital, Bissau, se centró en capacitar a los técnicos de campo para hacer frente a dos enemigos de la producción de cultivos en Guinea-Bissau, a saber, el gusano cogollero (Spodoptera frugiperda) y la mosca de la fruta (Bactrocera dorsalis). El gusano cogollero afecta a cultivos como el maíz y da lugar a una baja producción de cereales, insuficiente para satisfacer la demanda del país. La mosca de la fruta, por su parte, afecta a frutas como el mango, los cítricos, la guayaba y las bayas, todos ellos importantes cultivos alimentarios y de renta en Guinea-Bissau.

La formación fue organizada por la Dirección de Servicios Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Guinea-Bissau y la Secretaría de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF), con el apoyo de la Representación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Guinea-Bissau, bajo los auspicios del Programa fitosanitario africano.

El Programa fitosanitario africano es una iniciativa de la CIPF diseñada para dotar de mayor capacidad técnica al personal fitosanitario de los 54 países africanos. Se prevé que la mejora de la capacidad fitosanitaria del continente ayude a los países africanos a aplicar las normas fitosanitarias internacionales, eliminar el hambre y reducir la pobreza mediante el aumento del crecimiento económico a través de la producción agrícola, la productividad y el comercio. El Programa fitosanitario, por lo tanto, pretende equipar a las organizaciones nacionales de protección fitosanitaria (ONPF) con enfoques basados en la ciencia, tecnología avanzada y herramientas para vigilar, prevenir, detectar y, en última instancia, gestionar importantes plagas y enfermedades de las plantas que amenazan la seguridad alimentaria, el medio ambiente y el crecimiento económico. El Programa está coordinado por la Secretaría de la CIPF, con el apoyo del Departamento de Agricultura, Desarrollo Rural, Economía Azul y Medio Ambiente Sostenible de la Unión Africana y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA). Guinea-Bissau es uno de los 11 países africanos que participan en la fase piloto del Programa.

Reforzar el desarrollo de capacidades para la sanidad vegetal

"La baja capacidad de la infraestructura de diagnóstico y notificación fitosanitaria sigue siendo una debilidad clave en el sistema de sanidad vegetal de África, como se destaca en la Estrategia fitosanitaria para África 2022-2036", señaló Osama El-Lissy, secretario de la CIPF. "Por lo tanto, felicito al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y a la Dirección de servicios fitosanitarios, que es la ONPF de Guinea-Bissau, por haber llevado a cabo con éxito esta importante formación y por mostrar su compromiso con la mejora de la capacidad nacional para la detección rápida y la respuesta a las plagas de las plantas", añadió.

Como parte de las iniciativas del desarrollo de capacidades, cada participante en la formación recibirá una tableta con la aplicación móvil del Programa personalizada con el objetivo de mejorar la eficiencia en el seguimiento, la detección, la recogida, el registro y el uso de datos sobre plagas de las plantas. La aplicación puede utilizarse incluso en zonas remotas sin conexión a Internet. Una vez que el dispositivo vuelve a estar en línea, los datos se actualizan automáticamente, lo que permite al personal tomar las medidas necesarias para prevenir o responder a una amenaza de plaga.

África pierde cada año miles de millones de dólares en cosechas dañadas por las plagas, lo que repercute en la seguridad alimentaria y el crecimiento económico. Guinea-Bissau es uno de los países que goza de condiciones agroecológicas favorables para el desarrollo agrícola. Por lo tanto, minimizar el impacto de las plagas vegetales ofrece una oportunidad única para aumentar significativamente la producción agrícola, así como el comercio regional e internacional.

"La sanidad vegetal es muy importante para Guinea-Bissau y merece especial atención", afirmó Fatumata Djau Baldé, ministra de Agricultura y Desarrollo Rural de Guinea-Bissau. El Programa es una iniciativa encomiable de la CIPF y aconsejo a los participantes en esta formación que pongan en práctica lo aprendido.

*Intervención oportuna

Julio Malam Injai, director general del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Guinea-Bissau, elogió la oportunidad del Programa fitosanitario: "El gusano cogollero y la mosca de la fruta son actualmente las plagas más preocupantes que afectan a la agricultura, debido a los daños que causan y a las regulaciones impuestas a las exportaciones por los países que están libres de estas plagas. El dominio de las herramientas propuestas en esta formación dotará a nuestro país de agentes cualificados en la vigilancia y recogida de datos de las dos plagas, ofreciendo así datos fiables para su correcta gestión", añadió.

"En 2006, Guinea-Bissau se enfrentó a una importante invasión de la mosca de la fruta en los árboles de mango (Manguifera indica), y en 2017, a una infestación destructiva del gusano cogollero en el cultivo de maíz (Zea mays L.), que causó una fuerte y persistente presión parasitaria en el mango y el maíz y puso en peligro la seguridad alimentaria", explicó Maria Rosa de Sa Evora Ferreira, directora de los Servicios de Protección Vegetal del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural. "Era fundamental esbozar estrategias correctas para la gestión sostenible de estas dos plagas. Por ello, la formación promoverá el uso de métodos diversos e integrados para el control de las plagas. Al final de los tres días de formación, los participantes, todos ellos agentes fitosanitarios, habrán adquirido más conocimientos sobre la recopilación de datos oportunos y precisos, la presentación y el uso de los datos de vigilancia, y estarán al corriente de los métodos modernos de recopilación de datos y gestión de plagas”, añadió.

La formación es una continuación del taller de formación de formadores sobre la APP celebrado el año pasado en El Cairo (Egipto). Durante esta formación, se impartió capacitación sobre la aplicación móvil personalizada del programa a unos 100 miembros del personal fitosanitario de los 11 países piloto del programa, entre los que se encontraban seis expertos fitosanitarios de Guinea-Bissau, con el fin de mejorar la eficacia en el seguimiento, la detección, la recopilación, el registro y el uso de datos sobre plagas de las plantas. Estos seis expertos han capacitado ahora al personal fitosanitario sobre el terreno del país, en un.

"Las organizaciones nacionales de protección fitosanitaria están al frente de la ejecución a nivel de sus respectivos países, por lo que la Dirección de Protección Fitosanitaria y sus técnicos serán responsables de la ejecución diaria del programa en cada país", aseguró Mário Augusto Dos Reis, representante adjunto de la FAO en Guinea-Bissau.

"Cada participante tendrá acceso a un conjunto de recursos técnicos, incluidos protocolos de estudio de plagas y tabletas de última generación. Estamos comprometidos con la CIPF y otros colaboradores en la tarea de transformar los sistemas agroalimentarios y promover la producción y el consumo sostenibles a través de la protección fitosanitaria, con el fin de garantizar la seguridad alimentaria mundial en Guinea-Bissau", añadió.

Acerca de la CIPF La CIPF es un tratado internacional ratificado por 185 partes contratantes, esto es, 184 países y la Unión Europea, cuyo objetivo es proteger los recursos vegetales del mundo de la introducción y propagación de plagas, al tiempo que promueve un comercio seguro. Las Normas Internacionales para Medidas Fitosanitarias (NIMF), elaboradas bajo los auspicios de la CIPF, ayudan a los países a aplicar las normas fitosanitarias nacionales y los requisitos de importación. La CIPF, depositada en la FAO, es la única entidad normativa mundial en materia de sanidad vegetal.

Acerca de la FAO

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) es un organismo especializado de las Naciones Unidas que dirige los esfuerzos internacionales para vencer el hambre. El objetivo de la FAO es lograr la seguridad alimentaria para todos y garantizar que las personas tengan acceso regular a suficientes alimentos de alta calidad para llevar una vida activa y sana. La FAO trabaja para transformar los sistemas agroalimentarios promoviendo la producción y el consumo sostenibles, incluyendo la protección de las plantas del mundo, para alcanzar la seguridad alimentaria mundial. La FAO trabaja en más de 130 países de todo el mundo y cuenta con 195 miembros: 194 países y la Unión Europea.

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